Querido amigos de Archivel:
Lo primero que deseo transmitiros es una profunda satisfacción y alegría de poder estar un año más entre vosotros. Me gustaría reflejar una idea sacada de la Encíclica Salvados en Esperanza del Papa Benedicto XVI: “La vida humana es un camino. ¿Hacia qué meta? ¿Cómo encontramos el rumbo? La vida es como un viaje por el mar de la historia, a menudo oscuro y borrascoso, un viaje en el que escudriñamos los astros que nos indican la ruta. Las verdaderas estrellas de nuestra vida son las personas que han sabido vivir rectamente. Ellas son luces de esperanza. Jesucristo es ciertamente la luz por excelencia, el Sol que brilla sobre todas las tinieblas de la historia. Pero para llegar hasta El necesitamos luces cercanas, personas que dan luz reflejando la luz de Cristo, ofreciendo así la orientación para nuestra travesía”
Así cada diciembre los hijos de Archivel y los que, sin serlo, nos sentimos tales, encumbramos sobre el horizonte de nuestro pueblo esa poderosa luz de esperanza llamada Santa Bárbara.
Vivimos tiempos difíciles de descristianización y paganismo. Así, y en algunos aspectos era también la sociedad en la que Santa Bárbara y los primeros seguidores de Cristo vivieron. ¡Y la cambiaron en buena medida! Ella desde su más tierna juventud se convirtió al cristianismo, pero estoy seguro, que esto pudo ser así, porque antes otros le habrían testimoniado a aquel de quien nace la Verdad y la Vida: Jesucristo. Al acercarse a Jesús por la fe fue, “arrancada de las tinieblas y trasladada al reino de la luz admirable“. Este es el mensaje que escucharíamos de labios de nuestra santa si los oídos del alma supieran escuchar: si queréis construir un mundo luminoso por la esperanza, acercaos a Dios y dejaos iluminar por El.
Os invito a que estos días de fiesta sean un convivir y en este convivir, nacen y se comparten esperanzas, ilusiones, proyectos y sueños que sólo se pueden convertir en una realidad y no ser meras utopías inalcanzables, si son compartidos.
Mis esperanzas y mis ilusiones que terminan y empiezan en Dios, sólo pueden ser vividas si se materializan en el día a día con vosotros y entre vosotros. Hemos de poner la mirada en un horizonte más allá de las cuatro paredes en la que hemos encerrado la vida. Dicho en una palabra, podremos vivir, pero es más hermoso y gratificante el “convivir”.
Hemos de Ser Cristianos y vivir con coherencia las Fiestas de Santa Bárbara .Ser Cristianos no es sólo estar bautizado y acompañarle en la procesión. Es imitar la audacia y entrega de nuesta Patrona hasta derramar la sangre por Aquel que nos ha amado primero. Que la Virgen de la Esperanza nos permita nuevamente recuperar las esperanzas quebradas, las ilusiones rotas y los sueños perdidos. Que en estas Fiestas tengamos la audacia de reinventar caminos que nos unan más a su Hijo Jesucristo. Que a los Pies de la Virgen podamos desterrar los temores que nos impiden abrir los brazos y acogernos unos a otros como Ella lo hace en estas Fiestas.
Este es mi deseo para todos nosotros, hecho oración en estos días: ¡Santa Bárbara, enséñanos a creer en Dios, a esperar en El, a amarle y amarnos, como tú lo hiciste. Indica a los hijos de este pueblo el camino hacia su Reino! ¡Madre del Cielo, Luz de esperanza, brilla sobre nosotros y acompáñanos en nuestro caminar hacia el Padre!
Os desea FELICES FIESTAS vuestro cura.
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